una escuela de Fe y de Alegría para poder transformar las realidades, una escuela que se proponga pensar y repensar nuevas respuestas para mejorar a educación, proactiva, que convoque, que busque justicia y que muestre en sus prácticas cotidianas al Dios de la vida
El corazón de Fe y Alegría está más dispuesto que nunca para “amar y servir”, desde esa profunda fe, que emana del Cristo que camina con su pueblo. Son 60 años fraguando hoy una educación que libera y humaniza, para que toda persona siga siendo, desde el reconocimiento del otro, protagonista de su propia liberación.