Desde el 2021 el ingreso a Panamá por la peligrosa selva del Darién ha ocupado titulares en diversos medios nacionales e internacionales. Las cifras oficiales brindadas por el Estado panameño dan cuenta que más de 400 mil personas migrantes ingresaron entre enero de 2021 y enero de 2023. Cerca de 45 mil son personas en extrema vulnerabilidad y riesgo: niñas, niños y adolescentes. La gran mayoría siguieron su ruta hacia el norte del continente.
El año pasado (2022) más de 248 mil personas hicieron este camino. Los venezolanos encabezaron las cifras de ingreso con más de 150 mil personas de esta nacionalidad. A inicios de este año el repunte ha sido de la población haitiana que solo en el pasado mes de enero alcanzó la cifra de 12,585 personas, más de la mitad que ingresó durante todo el año pasado- 22,435. Le siguen ecuatorianos con 8,240 personas y un leve aumento de los venezolanos desde octubre del año pasado con 3,535 personas. Como vemos, los flujos siguen de forma continuada y tienden a crecer de manera exponencial. La subdirectora del Servicio Nacional de Migración, María Isabel Saravia, señalo a la agencia EFE, que la “…tendencia pareciera no disminuirá en los próximos meses. Las cifras en el 2023 no van a bajar por diversas causas: sociopolíticas, geográficas, cambio climático, era poscovid, temas de oportunidades, la guerra en Ucrania…”.
Desde Fe y Alegría Panamá seguimos monitoreando los flujos migratorios y estamos atentos a seguir brindado apoyo solidario a esta población vulnerable en su lucha y en su camino, buscando una vida digna, con oportunidades y sostenible.
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