Javier Barrios | Comunicaciones Fe y Alegría Venezuela
A lo largo de su historia, Fe y Alegría Venezuela ha graduado a miles de estudiantes que, con su talento y capacidades, han enaltecido el nombre del Movimiento y del país. Un ejemplo de ello es Hembert Alfonzo, egresado del movimiento hace 20 años.
Hoy, Alfonzo reside en Santiago de Chile y ocupa el cargo de Gerente de Transformación Digital en Falabella, una de las principales cadenas de retail en América Latina. Hembert rememora con emoción su paso por las instituciones educativas de Fe y Alegría, donde cursó en los colegios Luis Cañizales Verde y Enrique de Ossó, en Caracas.
“Fe y Alegría impactó mi vida desde el principio, en formación y valores. Gracias a su apoyo, obtuve una beca del 100% en la Universidad Metropolitana, lo que me permitió alcanzar mi carrera profesional y abrir puertas”, relata Hembert, quien además fue presidente de la asociación de exalumnos del Movimiento.
Desde sus aulas en el sector Cristo Rey y en Artigas, entre 2000 y 2004 respectivamente, Alfonzo recibió no solo conocimientos académicos, sino también principios de fe, honestidad, respeto y compañerismo que hoy siguen siendo fundamentales en su vida personal y profesional. “Esa educación de calidad, accesible y basada en valores, me preparó para ser la persona que soy ahora”, comenta.
Hembert detalla que su trayectoria profesional comenzó gracias a las competencias adquiridas en Fe y Alegría. Posteriormente, a través de un convenio entre la organización y la Universidad Metropolitana, obtuvo el título de ingeniero de sistemas y dos diplomados: uno en gestión industrial y otro en consultoría gerencial, los cuales lo orientaron hacia el ámbito de la tecnología y la auditoría.
“Entonces hice una formación como auditor de tecnología de la información. Actualmente estoy trabajando en Falabella, un grupo multinacional chileno de venta al detal y uno de los ecosistemas físico-digitales más grandes de América Latina”, puntualizó.
La historia de Hembert refleja el profundo impacto del Movimiento en la vida de muchas generaciones. La asociación de exalumnos, que él mismo dirigió en el pasado, se encargaba de fortalecer los lazos entre los egresados y de apoyar a nuevos estudiantes, promoviendo el legado solidario y formativo de Fe y Alegría.
Con motivo de los 70 años del movimiento, Alfonzo comparte un mensaje de aliento y compromiso: “Los invito a apoyar, a participar y a mantener viva la llama de Fe y Alegría. Es fundamental que sigamos creyendo en la educación como un motor de cambio social, que nos da fe para seguir adelante y alegrías por los logros alcanzados. La solidaridad y el compromiso de todos son claves para que esta historia continúe”.
En estos 70 años, Fe y Alegría sigue siendo un símbolo de esperanza, compromiso y transformación. Y su llama, como la de Hembert y tantos otros exalumnos, continúa iluminando caminos hacia un futuro mejor.
Caracas, 24 de julio de 2025
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