1 de marzo 2022
Por: Jesús Orbegozo, S.J.
A los 67 años de la fundación de Fe y Alegría, he considerado que es un momento oportuno para hacer un breve balance del Programa de Educación Universitaria de Fe y Alegría, especialmente al retornar recientemente a las filas de la institución como Rector del Programa, después de una larga ausencia formal. Me propongo hacer memoria, situarnos en la actualidad y esbozar algunos retos pendientes de la Educación Universitaria de FyA.
Memoria
El P. José María Vélaz (1910-1985) había visualizado la necesidad de dar continuidad educativa en el nivel universitario a los alumnos de Fe y Alegría, como consta en diversas partes de sus escritos. Su razonamiento es sencillo, Fe y Alegría fue creado como un movimiento educativo con vocación de transformación social y para los cambios necesarios en la sociedad se requiere de personas con formación profesional y con sensibilidad social.
En las Cartas del Masparro (pp. 50-51), el P. Vélaz indica las diversas maneras cómo Fe y Alegría puede abordar un sólido programa universitario, con seis estrategias diversas:
“8.1 Los Colegios deben tener especial interés en atraer a sus exalumnos universitarios. Se les puede proporcionar algún trabajo a los mejores, juegos, excursiones.
8.2 Los jóvenes pobres carecen de un sitio apropiado para estudiar sin ruidos y con alguna comodidad. El Colegio puede proporcionarlo.
8.3 Por trabajo de todos, Colegio y Estudiantes, se puede enriquecer la Biblioteca con libros universitarios…
8.4 En algunos pocos lugares se pudiera pensar en una Residencia Universitaria realizada con sencillez y austeridad, sobre todo para Estudiantes que procedan del interior.
8.5 Hay que estudiar todas las posibilidades de lograr Becas para nuestros Muchachos. Crear nosotros becas con obligaciones de trabajo compensatorio.
8.6 Se puede ir creando alguno o algunos Institutos Tecnológicos Universitarios que prolonguen y perfeccionen los Institutos Medios Profesionales y Agropecuario Forestales.”
Un primer intento de crear una plataforma universitaria en Fe y Alegría se dio a comienzos de la década de los 80, con la conformación de una Escuela de Educación, de régimen semipresencial, en alianza con la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). A pesar de que se cumplieron con los requisitos académicos y organizativos, no se pudo llevar a cabo el proyecto ante la dificultad de un acuerdo interinstitucional, que requería de la UCAB abrirse a propuestas formativas diferentes a las existentes.
En el año 1985, Fe y Alegría entró en un Convenio con la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (UNESR), universidad estatal, para profesionalizar a sus maestros en ejercicio, llevándolos a nivel de licenciados en educación. Este programa, manejado totalmente con personal de Fe y Alegría, que contaba con la acreditación de la UNESR, siguió vigente hasta fechas recientes.