Exigir un financiamiento justo: nuestro compromiso en la Cumbre
Exigir un financiamiento justo: nuestro compromiso en la Cumbre
Comunicaciones I Fe y Alegría Internacional
En julio de 2025 se celebrará la 4ª Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo (FfD4), una cita clave para repensar los mecanismos que sostienen —o limitan— el cumplimiento de los derechos humanos a nivel global. Fe y Alegría estará presente en este espacio de alto nivel para defender el derecho al aprendizaje como eje estratégico del desarrollo humano sostenible.
Conversamos con Miguel Molina, coordinador del equipo de acción pública de Fe y Alegría Internacional, sobre la relevancia de esta cumbre, los desafíos del financiamiento educativo y la apuesta del Movimiento por una incidencia que nace del territorio y se proyecta al mundo.
1. ¿Por qué es importante para FyA participar en esta Cumbre?
Las Conferencias sobre Financiamiento para el Desarrollo son espacios de debate global convocados por las Naciones Unidas, donde se abordan los desafíos estructurales de la financiación del desarrollo sostenible. Reúnen a gobiernos, organismos multilaterales, el sector privado y la sociedad civil para discutir el rumbo del sistema financiero internacional.
Para Fe y Alegría, estar presentes es vital. Es la oportunidad de levantar la voz y exigir a los Estados que muestren su compromiso con propuestas concretas que aseguren recursos suficientes, sostenibles y justos para garantizar el derecho a la educación.
2. ¿Qué mensaje principal quiere transmitir Fe y Alegría en la Cumbre de Financiación para el Desarrollo?
En un contexto de drásticos recortes de la ayuda y el resurgimiento del interés propio nacional como principal impulsor de la cooperación internacional, la Cumbre ofrece la oportunidad de imaginar una respuesta multilateral a las crisis interconectadas de desigualdad económica, climática, ambiental, de género y de riqueza que, a su vez, contribuyen a la crisis de la educación de Todas y Todos.
3. ¿Por qué es importante vincular la financiación del desarrollo con el derecho a una educación de calidad?
El punto de partida es entender la educación pública y de calidad como un derecho humano, que no es posible garantizar con el mero hecho de asistir a la escuela, sino existen las condiciones necesarias para el aprendizaje (infraestructura, condiciones de higiene, maestros, recursos didácticos, etc.)
En segundo lugar, es importante reconocer que los mayores desafíos en la financiación educativa están arraigados en los mecanismos de decisión de la economía internacional.
Espacios internacionales como la 4ª FfD representan la oportunidad de levantar la mano para exigir el Derecho al Aprendizaje poniendo en el centro a la persona como sujeto de derechos.
4. ¿Qué alianzas internacionales ha fortalecido Fe y Alegría para esta Cumbre?
El camino a la 4ª FfD ha significado un proceso largo y de mucha negociación para definir cuáles temas entran a debate y cuáles no. Por lo que, la única manera de hacerse presente ha sido mediante el trabajo en red y las alianzas con otros.
Durante este proceso, nos hemos ido acercando a espacios ya naturales de la Federación como la Campaña Mundial por la Educación, el espacio de ONGd, la Campaña Latinoamericana por el derecho a la Educación, entre otros. Y en el camino, nos hemos ido encontrando con otras organizaciones ya aliadas y hemos hecho alianzas con otras nuevas. Por lo que, de este proceso, aprendemos todos y hacemos juntos lo que solos no podríamos hacer.
5. ¿Qué retos enfrenta Fe y Alegría en espacios de debate global como este?
El reto permanente es continuar posicionándonos como un actor global con propuestas sólidas para promover la educación para todos y todas. También debemos seguir creciendo en una narrativa de incidencia basada en evidencia y en nuestra práctica educativa y social. Y, quizás lo más importante, es que debemos garantizar que las comunidades que acompañamos tengan un rol protagónico en estos espacios. No podemos hablar sobre ellas, sino con ellas. Solo así nuestra voz tiene sentido.